La evolución de la observación docente: De los ojos humanos a la inteligencia artificial
Análisis

La evolución de la observación docente: De los ojos humanos a la inteligencia artificial

Publicado por Sebastián Marambio5 minutos de lectura
BlogLa evolución de la observación docente: De los ojos humanos a la inteligencia artificial

Resumen: La observación tradicional de clases es infrecuente y genera ansiedad en los docentes. La tecnología ha evolucionado desde grabaciones básicas hasta sistemas potenciados por IA que analizan aspectos tanto auditivos como visuales de la enseñanza. Esta evolución incluye sistemas como Swivl para grabación automatizada y TeachFX para analizar patrones de conversación en el aula. Los recientes avances en IA han democratizado estas tecnologías, haciendo que la retroalimentación de alta calidad sea accesible para todos los docentes. El objetivo final es transformar la observación de un proceso evaluativo a uno de apoyo que fomente el crecimiento profesional continuo.

La enseñanza es, paradójicamente, una profesión profundamente colaborativa y al mismo tiempo aislante. Una vez que la puerta del aula se cierra, muchos docentes se encuentran esencialmente solos con sus estudiantes, día tras día, con una mínima retroalimentación externa sobre su práctica.

La investigación muestra consistentemente que los docentes (como todas las personas), aprenden cuando reciben retroalimentación significativa y con frecuencia. Sabemos esto como educadores: la retroalimentación es esencial para el aprendizaje, independientemente de la edad o profesión. Sin embargo, el modelo tradicional de observación en el aula (un administrador o coach que visita quizás una o dos veces al año) crea una mentalidad de escasez en torno a este recurso profesional vital.

Esta escasez transforma lo que debería ser un ejercicio rutinario de desarrollo profesional en una evaluación de alto impacto. Cuando la retroalimentación es infrecuente, se vuelve amenazante en lugar de nutritiva. Los docentes naturalmente desarrollan resistencia a la observación, viéndola como una evaluación en lugar de un apoyo. Esta dinámica socava el propósito mismo de la observación en el aula y crea un clima donde la innovación y la toma de riesgos son sofocadas en lugar de fomentadas.

La evolución de la tecnología de observación

Durante la última década, la tecnología ha transformado la observación en el aula a través de tres innovaciones principales:

Primero, la simple grabación de video permitió a docentes verse desde la perspectiva del estudiante y a mentores proporcionar retroalimentación basada en evidencia. Sin embargo, estos sistemas resultaban intrusivos y generaban horas de video que requerían revisión manual.

Hacia 2015, Swivl revolucionó el proceso con un soporte robótico que seguía automáticamente al docente utilizando un marcador portable. Este sistema permitía a los profesores grabar sus clases sin ayuda externa y compartirlas selectivamente con mentores o coaches, convirtiendo la grabación en una herramienta cotidiana.

Un robot Swivl en un trípode con un móvil montado encima, sigue a una docente para mantenerla en foco durante una clase.
Un robot Swivl automáticamente sigue a una docente durante una clase.

A pesar de estos avances, analizar las prácticas docentes seguía consumiendo demasiado tiempo. En 2017, TeachFX abordó este problema aplicando inteligencia artificial al audio del aula. Los docentes grababan sus clases con una aplicación móvil y la IA analizaba automáticamente patrones clave: tiempo de habla docente versus estudiantes, tipos de preguntas realizadas y tiempos de espera.

Esta innovación transformó la observación del aula de evaluaciones esporádicas a retroalimentación regular y automatizada, permitiendo a muchos docentes descubrir patrones en su enseñanza que desconocían, como el dominio excesivo de la conversación o la atención desigual entre estudiantes.

Mientras dirigía el Centro de Innovación Educativa de Chile en el Ministerio de Educación desde 2018 hasta 2022, abogué por estas tecnologías emergentes como herramientas para apoyar el desarrollo docente. Reconocimos el desafío fundamental: los docentes en las escuelas chilenas, como sus contrapartes en todo el mundo, recibían muy poca retroalimentación y con muy poca frecuencia.

Iniciamos programas piloto con escuelas en todo el país, usando sistemas de grabación de video para apoyar ciclos de retroalimentación docente. Los resultados fueron prometedores: los docentes que inicialmente abordaron la tecnología con escepticismo a menudo se convirtieron en sus defensores más fuertes una vez que experimentaron los beneficios de la retroalimentación regular.

La revolución de la IA en la observación docente

En solo el último año y medio, hemos presenciado un cambio significativo en la tecnología de observación en el aula. Las inversiones masivas de empresas como OpenAI, Anthropic, Meta y Google han dado como resultado modelos de lenguaje natural tremendamente poderosos y además accesibles, democratizando capacidades que eran inimaginables hace poco.

Anteriormente, empresas como TeachFX debían invertir recursos sustanciales en desarrollar modelos de IA propietarios. Hoy, cualquiera puede construir sistemas similares o más avanzados conectándose a los nuevos modelos, reduciendo barreras y acelerando la innovación.

La revolución es particularmente poderosa por la naturaleza multimodal de estos sistemas. Los modelos actuales destacan tanto en análisis de audio como de información visual, abriendo nuevas dimensiones para la observación:

  • Tienen una capacidad impresionante para transcribir el audio incluso de aulas con mucho ruido ambiental, escuchando muchas veces mejor que uno mismo
  • El análisis de video puede revelar información que no se puede deducir del audio. Por ejemplo, sobre cómo está organizada el aula, si los estudiantes están en grupos o sentados mirando hacia el frente
  • Pueden apoyar en el análisis, responder todo tipo de preguntas del usuario, o aplicar el protocolo de observación docente que use la institución, según sus objetivos

Herramientas emergentes como TeachView de Circles aprovechan estos nuevos modelos para crear experiencias potentes y accesibles.

Con TeachView, un docente puede por ejemplo preguntar a la IA: "Muéstrame momentos donde hice preguntas de orden superior" o "Identifica ejemplos de gestión efectiva del aula". La IA localiza y presenta estos momentos instantáneamente, haciendo la retroalimentación más personalizada y accionable.

Una profesora frente a sus estudiantes. Vista a través del lente de una cámara de grabación.
Una profesora frente a sus estudiantes. Vista a través del lente de una cámara de grabación.

Esta impresionante capacidad, disponible a bajo costo, facilita tanto todo el ejercicio de observación y de dar feedback al docente que abre la posibilidad de transformar la observación de clases en un ejercicio cotidiano. Y cuando la retroalimentación se vuelve abundante en lugar de escasa, se transforma de evaluación a apoyo, y la apertura al crecimiento florece.

Democratizando el desarrollo profesional

La trayectoria de la tecnología de observación en el aula sigue un patrón familiar en la innovación: de especializada, costosa y compleja a accesible, asequible y simple. Lo que comenzó como una práctica de élite que requería observadores entrenados ha evolucionado en una herramienta democrática disponible para cualquier docente con un smartphone.

Esta democratización aborda un problema fundamental de equidad en el desarrollo profesional. Históricamente, la retroalimentación de mayor calidad se concentraba en escuelas dispuestas a invertir mucho tiempo de mentores en programas de observación. La tecnología ahora hace posible proporcionar retroalimentación significativa a cada docente, independientemente de los recursos de su escuela.

La IA no reemplaza el coaching humano; de hecho, hace que el coaching humano sea más efectivo al enfocarlo en lo que más importa. Los coaches ya no necesitan gastar su tiempo limitado recopilando datos básicos; en su lugar, pueden centrarse en ayudar a los docentes a interpretar patrones, desarrollar estrategias e implementar cambios. La conversación se eleva de "esto es lo que sucedió en tu aula" a "esto es lo que significa y cómo podríamos mejorarlo".

Estamos pasando de un mundo de escasez de retroalimentación a uno de abundancia de retroalimentación, con profundas implicaciones para la profesión docente. Tres cambios clave destacan:

  1. De la evaluación al crecimiento: Cuando la retroalimentación se vuelve regular y de bajo impacto, naturalmente cambia de ser crítica a ser orientada al desarrollo.
  2. Del aislamiento a la conexión: La tecnología crea nuevas posibilidades para que los docentes compartan prácticas y aprendan unos de otros, derribando las paredes del aula.
  3. De la intuición a la evidencia: Los docentes obtienen acceso a datos objetivos sobre su práctica, complementando su experiencia subjetiva.

Al mirar hacia el futuro, la promesa es una profesión docente que mejora continuamente a través de la retroalimentación, tal como esperamos que nuestros estudiantes crezcan a través de la retroalimentación que les proporcionamos. Las barreras históricas (limitaciones de recursos, complejidad tecnológica y resistencia psicológica) se están disolviendo gradualmente.

La buena enseñanza siempre ha sido en parte arte y en parte ciencia. El arte siempre requerirá juicio humano, creatividad y conexión. Pero la ciencia, comprender los patrones de instrucción efectiva, ahora puede ser apoyada por la tecnología de maneras que hacen que el arte sea más accesible para todos los docentes.

Para los líderes educativos, el mensaje es claro: ya no necesitamos aceptar la falsa elección entre calidad y escala en la retroalimentación docente. La tecnología ha creado un tercer camino: retroalimentación personalizada de alta calidad a escala. Nuestra responsabilidad ahora es implementar estas herramientas de manera reflexiva, con cuidadosa atención a la agencia docente, la implementación de apoyo y el uso ético de los datos.

La observación en el aula del mañana será más eficiente y será más humana, centrando el escaso tiempo cara a cara en los aspectos de la enseñanza que la tecnología nunca podrá capturar: la pasión, el propósito y la conexión personal que nos atrae a todos a esta profesión.